Torre central del Castillo de Vezio
Como tantas otras cordilleras, la alpina constituye una defensa natural contra las invasiones exteriores. Sin embargo, para que la misma sea efectiva debe encontrarse fortificada en sus puntos más débiles, es decir en sus pasos de altura. En el siglo III a.C. los dominios romanos no incluían el noroeste de Italia, en manos celtas, por lo que poco podían hacer para evitar una invasión a través de los Alpes.
Por ese entonces los romanos habían derrotado a Cartago en la Primera Guerra Púnica. El escenario bélico habían sido las islas mediterráneas, tras lo cual los cartagineses debieron afrontar el costo de una guerra civil en el norte de África. Frente a esto, el general púnico Anibal Barca decidió llevar la guerra al corazón de Italia, para lo que contaba con unos 50.000 hombres, casi 10.000 caballos y medio centenar de elefantes, que luego de cruzar los Alpes, avanzaron hacia el sur y sembraron el suelo italiano de sangre durante década y media. Sin embargo, Roma triunfó, salió fortalecida, y en los próximos siglos entraría en un fuerte proceso de expansión territorial.
Vista de Varenna desde la fortaleza
El control militar de los Alpes reportaba una fuerte posición estratégica, tanto para repeler invasiones, como para planear campañas militares al interior del continente. La geografía terrestre de los Alpes dificultaba el movimiento de tropas, mientras que sus lagos permitían maniobrar con mayor velocidad. Por su forma alargada de norte a sur, el lago de Como contó desde tiempos antiguos con una importancia primordial en la estrategia militar de los pueblos de la zona. En el se pueden encontrar fortificaciones que cubren un período histórico que va desde fines del Imperio Romano hasta la Primera Guerra.
Torre lateral
Si bien sus orígenes se encuentran en el siglo V, la estructura actual del Castillo de Vezio data del siglo XI. De forma rectangular y paredes relativamente angostas, esta fortificación difícilmente fuera operativa contra ejércitos dotados de artillería a base de pólvora, como se tornó habitual desde mediados del siglo XV. La zona es de difícil acceso por tierra y para moverse en dirección norte o sur los actuales habitantes utilizan túneles construidos bajo las laderas de las montañas. A diferencia del Castillo de Brescia, de gran importancia estratégica, el Castillo de Vezio no fue espacio de disputa entre fuerzas internacionales, y su importancia estaba más ligada a los enfrentamientos entre facciones y poderes al interior de la sociedad feudal.
La ciudad de Bellagio funcionaba como centro vacacional durante el dominio romano
La fortificación cuenta con una privilegiada vista del Lago de Como, en la que se puede apreciar su apertura en dos brazos hacia el sur. Sobre la orilla hay una enorme cantidad de olivos, que le otorgan al lago un aspecto mediterráneo en verano. Se cree que sus primeras semillas habrían sido traídos por esclavos procedentes de Grecia. En dirección oeste se encuentra la ciudad de Menaggio, mientras que al sudoeste se encuentra Bellagio, utilizada en tiempos romanos como un centro de recreo vacacional.
Entrada principal al Castillo
Mateando por el mundo: diario de un viaje 